La vida se vive mejor cuando tengo el pelo suelto

Vivimos en un mundo tan superficial y tan de prisa qué nos olvidamos de la principal razón por la que estamos aquí: ¡vivir!.

Preocupados siempre por cosas banales aunque algunas no tanto, dejamos de disfrutar esos momentos, detalles, esa maravillosa puesta de sol, inclusive esos días grises de lluvia que también tienen   su encanto y que la vida nos regala o simplemente dejamos de disfrutar nuestros días; nos agobiamos aunque esto en muchas ocasiones es inevitable ya que es parte de nuestra naturaleza el preocuparnos, por el simple hecho de que somos humanos y estamos hechos de sentimientos. Pero muchas veces  hacemos pausas por tratar de encontrar soluciones somos nuestros más estrictos jueces, así cómo también nos permitimos ser juzgados dando entrada a que eso nos lastime, nos auto saboteamos y nos paralizamos ante el miedo (digamos que el único miedo que me paraliza es no disfrutar lo que vine a vivir) y con esto recuerdo una de mis frases top "que la vida me perdone las veces que no la viví"

¿Recuerdan cuándo eran niños? esos momentitos que guardas como tesoros en tu corazón, cuándo tenían una idea y querían ponerla en práctica y sentían ese golpeteo en el corazón, no importaba nada sólo el presente eso que estabas viviendo; los juegos, las travesuras, las risas. Recuerdo mucho un día en especial en el hermoso y caluroso Veracruz, andaba de paseo con mamá, hermanas y toda la bola de primos -todos mayores que yo- si mal no recuerdo yo tenía entre 4 y 5 años,  y en aquellos tiempos era  fan de Gloria Trevi y su tan característico “pelo suelto”, aparte de que mi pelo natural es rizado y por alguna extraña razón no me gustaba peinarme -por no decir que odiaba los estirones de pelo que me daba doña Dorita para desenredar mis chinos-  así que siempre andaba peinada muy ad-hoc con el hit de los gloriosos 90’s  "Pelo Suelto"  amaba esa canción y aún recuerdo que ese día  vestía una faldita de mezclilla de mucho vuelito con pequeños olanes y muchos brillos, continuando con la anécdota desde niña siempre he sido muy extrovertida nunca me ha dado vergüenza (casi nada) y aunque canto feo jajaja es una de las cosas que más disfruto hacer con todo el sentimiento a flor de piel, no recuerdo el porqué o cómo fue qué una prima me dijo – Betzy, ¿a que no te pones a cantar pelo suelto? - ¡no bueno! nunca me hubieran dado luz verde, me fuí como gorda en tobogán y en pleno malecón me puse a cantar con coreografía incluida – a mí me  gusta andar de pelo suelto… voy a traer el pelo suelto – y al compás de mi música interna  meneaba mi melena rizada. Un primo colocó en el piso su gorra y algunas personas que pasaban frente a mi concierto me dieron unas monedas, de pronto escuché un grito muy familiar de esos acostumbrados cuando hacía travesuras, era mi mamá  - ¡Betzyyyyyyyyy! - y con toda la pena del mundo me tomó del brazo y fué por mí, no le molestó el hecho de que yo cantara y bailara, finalmente era una niña jugando a estar frente a su público y reflectores, el inconveniente fué la vergüenza de que la gente me estaba dando dinero. Total qué recuerdo que en ese momento no me importaban los regaños de mamá después de hacer el ridículo en pleno malecón yo me sentía feliz el escenario era mío y los reflectores estaban puestos en mi y tan sólo por ese momento no me importaba un regaño de mamá, sabía que ese pequeño instante había valido la pena. Y cuento esta historia porque en ocasiones nos quejamos tanto de las decisiones que tomamos y dejamos de disfrutar ¿y si no hubiera hecho esto?, ¿y si esto fuera diferente? las cosas son así,  las decisiones que tomas es porqué así tu corazón lo quizó y al final sólo te queda decir "pero lo bailao nadie me lo quita".

Aún sigo disfrutando esos momentos que me regala la vida y  cada que siento ese golpe de adrenalina que te da cuando estás viviendo algo emocionante para ti y que simplemente lo puedo describir cómo sentirse vivo "solo puedo mirar arriba y decir vale la pena todo - ¡gracias! - y volvería a pagar el precio de lo que conlleve, y en este momento me siento así, no importa el camino o las tempestades,  ni de las decisiones que he tomado pues se que todo ha valido la pena.

De eso se trata, por esta razón escribo esto, porque dejamos de apreciar nuestra vida y sólo nos agobiamos, nos enfrascamos tanto en nuestros problemas, pensando en lo que tenemos o no tenemos, pensamos en el futuro, volteamos hacia el pasado, pero casi nunca nos detenemos a disfrutar nuestro presente a sentirnos bien con lo que tenemos, con lo que estamos haciendo en ese momento, con lo que nos rodea y dejamos de disfrutar eso momentitos, dejamos de atesorarlos, olvidamos lo que nos mueve, porque eso que alguna vez te movió es  la principal razón por la que estás en donde estás y entre más te quejas y das prioridad a otras cosas inclusive a lo que pueda opinar la gente, lo que sutanito tiene y nosotros no....y en ocasiones la vida es eso que pasa en lo que nosotros estamos distraídos pensando en cosas o personas que no tenemos.

 Y tras escribir este último  párrafo, viene a mi  mente una canción de esas que escuchas y enseguida te ponen la pila al cien, te mueven las patitas y te incitan a bailar  me refiero a "Don´t you worry 'bout a thing"  de Stevie Wonder, la primera vez que la escuché fue en una de las escenas de la serie  "Scandal" en dónde la protagonista invitaba a uno de sus galanes a bailar, el diálogo me encantó y era algo así como:

 -baila conmigo Jack, no  estoy escogiendo… me escojo a mi, escojo a Olivia y Olivia en estos momentos está esta bailando ¡Soy libre! Así que puedes escoger entre bailar conmigo o salir de mi pista de baile, estoy bien bailando sola -💃

Y así como ocurre con personajes de ficción así es la vida no importa lo que tengas o lo que no tengas, si tienes o no tienes con quien bailar, si alguien quiere o no estar en tu vida (hablo en general), el punto es disfrutarlo sola o acompañado, bailando en el mejor antro del mundo o bailando en la sala de tu casa, no importa el momento; no importa el lugar; no importa la canción, lo que importa es que disfrutes cada día, cada minuto sin preocupaciones por que al final del día  es tu vida y el único responsable que decide si la sufre o la baila eres tu y los problemas no se van y no ganas nada con agobiarte sea lo que sea tendrá solución "recuerda no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo aguante"

Así que cuando estés en esos momentitos donde tu corazón se acelera o como yo les llamo "golpes de adrenalina" disfruta, por favor disfruta y cuando estés disfrutando olvídate de los peros porque somos muy propensos a eso, total que nada nos tiene contentos  que si estoy bien pero, si me gusta pero me gustaría más aquello, pero si mañana pasa esto, pero si a chuchita la bolsearon ¡bastaaaaa!. Deja que las cosas sucedan y tu baila en la pista llamada vida, disfrútala aprende a ser feliz con lo que tienes que cuando eso pasa las piezas del rompecabezas se acomodan, al final no vale arrepentirse de nada porque cada experiencia para bien o para mal nos deja una lección de vida. Y es que estoy segura que si  "mi yo" de niña me visitara en este momento me daría esa palmadita en la espalda y me diría "bien hecho, estoy orgullosa de ti" y yo solo le puedo responder voy hacer que lo sigas estando, solo no me hagas olvidar que la vida se vive mejor cuando tengo el pelo suelto. 😊